En Cámara Lenta P. 01

La limpieza reveló que el dibujo no había quedado demasiado dañado. Tras unas horas, las manchas habían desaparecido y sólo quedaban unas cuantas arrugas en el papel. Analía no pareció sospechar, y lo recibió con gusto. Aún hoy me cuesta creer que Analía conserve un retrato cubierto con... eso; pero así es. Mantuvimos una cierta amistad durante el resto del año escolar. Si bien los eventos de ese día nunca se repitieron, hicimos referencia a ellos en varias ocasiones. En ese colegio era difícil guardar secretos, y al parecer, nuestro encuentro llegó a oídos de un par de amigas suyas. Pero para entonces, yo ya había descubierto mayores placeres que sólo mirar.